MADRID

Última visita: Febrero 2020

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Su llegada a Madrid fue todo un acontecimiento y las colas en la calle Gran Vía eran interminables.

En mi primera visita en 2018, en el local de Gran Vía, me resultaron decepcionantes. Algo secas, carne un poco pasada de punto, bacon churruscado, patatas fritas saladísimas… Nada comparable a otras hamburgueserías de la ciudad. En resumidas cuentas, pensé en hablar seriamente con Barack Obama...

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En 2020 decidí darle una segunda oportunidad, pero esta vez en el local de la calle Serrano. La visita fue muchísimo mejor de lo que esperaba. Hamburguesa bien hecha, sabrosa, francamente buena.

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No sé si la calidad de la hamburguesa varía en función del local, pero sí que es cierto que la diferencia entre el local de Serrano y el de Gran Vía es considerable.

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Volveré.