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REMÍREZ DE GANUZA
B O D E G A
A pesar de su “juventud” está considerada como una de las bodegas más importantes de La Rioja y confieso que es una de mis favoritas. En mi casa no puede faltar nunca una de sus botellas, tanto tinto como blanco. Son siempre garantía de éxito.
Por este motivo, en cuanto tuve la posibilidad me acerqué a Samaniego (Álava) para ver de primera mano su bodega, sus viñedos y, sobre todo, intentar aprender un poco más sobre el maravilloso mundo del vino.
Algo que llama la atención en Remírez de Ganuza es el nivel de calidad de todo lo que rodea a esta bodega. Desde los corchos, las barricas, los hasta los propios viñedos. El nivel de exigencia es altísimo y nada se deja al azar.
También me llamó poderosamente la atención lo limpio que estaba todo. Evidentemente no es lo mismo visitar la bodega en agosto, como fue mi caso, que en plena vendimia, pero aún así me pareció increíble el nivel de limpieza e higiene de todas las instalaciones.
De la mano de José Urtasun, imposible tener un anfitrión mejor, pude visitar algunos de los viñedos y el interior de la bodega. Y no, no hubo forma de birlarles una de esas botellas que tienen con 100 puntos Parker. Una lástima...
Muchas veces nos falta mirar detrás de los éxitos para llegar a entender el porqué de los mismos. Un buen ejemplo es el blanco que tienen en el mercado, uno de los más vendidos desde que salió a la venta.
Hablar con la gente de la bodega te permite comprobar todo el trabajo que hay detrás de un proyecto como ese. Tantas pruebas y errores, tantos sueños, tanto trabajo y tanta inversión para conseguir un sueño.
Después de la visita, llegó el mejor momento de todos ya que hicimos una pequeña cata informal. Trasnocho 2009 y Fincas de Ganuza 2010. El primero, uno de mis tintos favoritos. Muy elegante, complejo, lleno de matices. Me gusta tanto que cuando nació mi segunda hija se lo regalé al médico y por el camino se perdió una botella que me bebí un día con un buen amigo. Salió redonda por cierto. Y el segundo, Fincas de Ganuza, un vino con una calidad sello de la casa pero con un precio magnífico. Me parece muy acertado el cambio de etiqueta, ahora es una botella más acorde a la estética de la bodega. Parece que no pero con eso también se venden botellas.
